por Jose Antonio Burriel, presidente de la Asociación No Más Violencia de Género “José Antonio Burriel”
Me gusta la idea: el año nuevo es como un libro en blanco para ir escribiendo. Y me gusta aún más la frase de García Montero: una invitación al futuro es el cuaderno en blanco. Claro que para escribir en el libro o cuaderno en blanco, para invitarnos al futuro, no hay que olvidar el pasado, el presente más cercano al horizonte que se avecina.
En el tema que nos preocupa –nuestra finalidad, la única de la Asociación y su web-, la violencia de género, la violencia sobre la mujer por el hecho de ser mujer en las relaciones de pareja, la vista atrás –necesaria para escribir el futuro- nos dice: a) Que, aún reconociendo una mayor sensibilidad en la sociedad, la violencia de genero está presente entre nosotros. b) Que seguimos moviéndonos en las cifras de víctimas mortales, y que quedan en la penumbra las víctimas de la violencia de género que guardan silencio, en la prisión del silencio. c) Que no existe –quizás sí en las palabras, pero más bien poco en los hechos- voluntad decidida en la práctica de erradicar la violencia de género en la sociedad. d) Que las iniciativas parecen versos sueltos y no rimas de una epopeya ética, porque epopeya es poner punto final a la violencia de género. e) Que, a veces, hay un punto de tristeza en la lucha.
¿Las líneas que hay que escribir en el libro en blanco que es un año nuevo? Son palabras que yo escribiría, se pueden escribir otras muchas. Pero escribiría éstas.
1. Máxima atención a los adolescentes: son el futuro de la sociedad, necesitan nuestra comprensión porque están iniciando el recorrido de sus vidas, porque quieren ser protagonistas de su propia historia.
2. Mayor exigencia en la especialización de los profesionales más cercanos a las mujeres víctimas de la violencia de género. La especialización –profesionalidad en definitiva- se convertirá en eficacia. También en una mayor confianza en las víctimas de violencia de genero de que la salida es posible.
3. Acerca de la sensibilización de la sociedad: no es suficiente con pedir mayor responsabilidad al entorno más cercano a la víctima, hay que arbitrar recursos a los que puedan acudir las personas del entorno para recabar ayuda, para saber cómo puedan ayudar más efectivamente a las víctimas.
4. Y… ¡no detenerse en la lucha, no dejarse llevar por el abatimiento! No todos los días del año pueden ser 25 de noviembre. Pero sí todos los días del año pueden, y deben de ser ocasión, para poner un esfuerzo más en la erradicación de la violencia de género en nuestra sociedad.
Con estas líneas comienzo a escribir en el libro blanco que es el año que comienza. Y las primeras palabras serán las palabras contadas que me alertan de una llamada en mi móvil: ¡Al alba, al alba venceré! Y lo recuerdo siempre: el alba es mi nieto, para el que quiero lo mejor: libertad y dignidad para todos. Lo costoso es que la responsabilidad se ha hecho ahora mayor por la confianza de tantas personas en la web y en la Asociación: ¡al alba, al alba venceré por todos, sobre todo por las mujeres víctimas de violencia de género!
¡Feliz Año 2014! Entre todos debemos escribir en el cuaderno nuevo para que esté lleno de esperanza, hechos y pasos decisivos.