Una relación que no es sana te hará sentir inseguro/a e infeliz.
1.- Las faltas de respeto.
Los insultos, las humillaciones y las burlas son una falta de respeto, así como los comentarios despectivos sobre tu aspecto, sobre tu cultura, sobre tu familia, sobre tus amigos, sobre todo lo que te afecte.
Cuando una persona te falta el respeto puede decirte por ejemplo: Siempre estás diciendo estupideces, o “No eres nada sin mí.
No importa cómo suene, la falta de respeto siempre nos hace daño. Y es posible que este daño perdure aún después de que la relación haya terminado porque afecta tu autoestima, algo que puede durar mucho tiempo.
AMOR ES RESPETO Y NO DESCALIFICACIÓN: SINCERIDAD, APOYO, CONFIANZA, GENEROSIDAD, COMPROMISO y RESPETO.
2.- ¿Te sientes escuchada/o?
A veces necesitamos más que una buena cobertura en el móvil para tener una buena comunicación. Si no te avisa cuando no va a llegar, no te llama en un largo tiempo, si hablas de las cosas que son importantes para ti y notas que te ignora, ¡algo no funciona! Si tu pareja y tú no admitís que os equivocáis y podéis perdonaros, tu relación te puede estar causando mucho dolor y ansiedad innecesarios, cuando esto ocurre es que hay falta de comunicación y no escucháis vuestras necesidades.
3.- Los celos.
Son un sentimiento que aparece en las personas cuando nos sentimos inseguras o pensamos que podemos perder algo que queremos. El sentimiento en sí, no es malo, lo negativo es cuando cualquier cosa nos hace sentir celos y pretendemos que la otra persona cambie y se adapte.
LOS CELOS A VECES SE CONFUNDEN CON EL AMOR.
Qué consecuencias podemos sufrir por los celos: aislamiento, pérdida de autonomía, desconfianza, relación asfixiante, chantaje emocional (me provocas celos…), sentimientos de culpa (le provoco los celos). Los celos afectan a la relación de modo negativo y es el mayor desencadenante de agresiones en parejas jóvenes.
4.- Las obligaciones.
Nadie tiene derecho a imponernos nada. Cada persona es diferente y con gustos distintos, por ello debemos aprender a tolerar a los demás. Nadie puede obligarnos a usar una determinada ropa, a hacer cosas que no nos gustan, a ir a determinados lugares, a estar con determinada gente. Somos libres y tenemos derecho a elegir y decidir según nuestros gustos. Si decide por su cuenta, sin consultar ni pedir tu opinión, ni siquiera en cosas que te atañen directamente, plantéate que eso puede estar afectando a tu libertad.
5.- Control total:
Te has preguntado alguna vez ¿quién manda en ti?, ¡solamente tù!. Nadie tiene derecho a decidir lo que puedes hacer, dónde puedes ir o cómo debes vestirte. Si tu pareja ejerce la doble moral: “haz lo que yo digo pero no lo que yo hago, reservándose el derecho de hacer cosas que te impide hacer a ti, si tienes que pedir permiso para salir, para quedar con una amiga o amigo, para poder moverte sin él/ella, si decide dónde podéis ir y qué hacéis de acuerdo con su exclusiva conveniencia, si toma las decisiones por ti, si elige hasta tu ropa, si en todo momento quiere saber dónde estás, y te llama constantemente para saberlo, si tu pareja quiere todo el control de la relación, ¡algo no funciona!.
EN UNA RELACIÓN SANA, HAY IGUALDAD, Y NO HAY UNA PERSONA QUE MANDA Y OTRA QUE OBEDECE
UNA RELACIÓN AFECTIVA SANA ES:
sinceridad
tolerancia
ser uno mismo
decisiones compartidas
dar y recibir apoyo
confianza
compromiso
deseo
igualdad
derecho a decir no
respeto mutuo
comunicación abierta
generosidad
etc…